Don Valentín Lledós descubrió en José Manyanet no solo a un buen estudiante, sino señales de una vocación al sacerdocio. Después de su madre, José Manyanet debió a don Valentín Lledós el llegar a ser sacerdote.
José fue monaguillo en la colegiata de Tremp. Don Valentín se ofreció para completar su formación de la escuela pública con clases particulares, sobre todo de latín, para prepararle a los estudios de segunda enseñanza.
José tenía muy buena voz y cantaba en el coro de la iglesia que dirigía don Valentín. En 1840, José Manyanet recibió la primera comunión de manos de su querido sacerdote.
Fuente: José Manyanet, Profeta de la Familia. J.M. Blanquet - J. Piquer
José fue monaguillo en la colegiata de Tremp. Don Valentín se ofreció para completar su formación de la escuela pública con clases particulares, sobre todo de latín, para prepararle a los estudios de segunda enseñanza.
José tenía muy buena voz y cantaba en el coro de la iglesia que dirigía don Valentín. En 1840, José Manyanet recibió la primera comunión de manos de su querido sacerdote.
Fuente: José Manyanet, Profeta de la Familia. J.M. Blanquet - J. Piquer
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